CRÓNICA DA CULTURA
A
Antonio Gamoneda, meu muito privilégio
III
Me llamo Maria
Me levanto, saludo
Enciendo las velas,
Me siento al piano
Que responde al nombre de Chopin
Pero
La exactitud de los dedos
No es nada más
Que
Obediencia
Y
Nada fija el instante
Que manda en todo
La flor indefensa
Cree que vale la pena
Así
IV
Me llamo Maria
Pregunto:
¿Todo lo que protege es también abismo?
En realidad, no lo sé
Pero todos ganamos nuestro diploma
No hay nadie que no tenga talento innato
Para la herida
Y
Nadie se salva
Dice el viejo poeta
Gran vitoria
De los sin dudas
Así
Teresa Bracinha Vieira